Es la cámara que siempre llevo encima y es la que uso habitualmente para fotografía de calle ya que cabe en mi bolsillo. Es compacta pero ofrece una calidad de imagen excepcional gracias a su objetivo increíblemente nítido y me permite, por su aspecto discreto, pasar totalmente desapercibido en las calles. Además, su encendido es casi inmediato, tarda menos de 1 segundo, por lo que la tengo siempre lista para disparar.
Esta cámara cuenta además con un sistema de enfoque “snap focus”, que permite preajustar la cámara a la distancia a la que ha de enfocar, algo especialmente útil para la fotografía de calle.
Esta cámara tiene un sensor APS-C y una focal de 18,3mm, equivalente a un 28mm en formato de 35mm, y una apertura f/2.8.